Historia de El Gran Combo: Los 1980s
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Los ’80s fue una década de estabilidad y éxito para El Gran Combo, manteniendo a sus cantantes y lanzando éxitos de forma consistente.
Sin embargo, hacia el final de la década, Rafael Ithier tuvo que buscar un poco de ayuda para lidiar con la creciente popularidad de la Salsa Romántica, mientras al mismo tiempo trataba de mantener su estilo musical para su fiel fanaticada.
Caras Nuevas en El Gran Combo
Acabo de mencionar que esta fue una década de estabilidad, no? Pero primero repasemos los cambios del último año de la década anterior y algunos que ocurrieron al comienzo de los 80s en camino hacia esa estabilidad que te mencioné.
Tomando un paso atrás al 1979, vimos que Martin Quiñonez Jr. dejó la agrupación un par de años después de reemplazar a su padre en las congas. También ese año Mike «Malaret» Marrero tuvo que abandonar el Combo por razones de salud. Mike acabaría pasando a mejor vida solo 3 años después. Ellos fueron reemplazados por Miguel «El Pollo» Torres, y Edgardo Morales respectivamente.
El año siguiente, El Gran Combo inicio los 80s con la salida de Nelson Feliciano (trompeta) y Keko Duchesne (saxofón). Feliciano había reemplazado a «Grillo» apenas un par de años antes. Ellos fueron reemplazados por el trompetista Victor «Cano» Rodríguez y el saxofonista-flautista-arreglista Freddie Miranda, respectivamente. Cano también llegó al Combo de la Primerísima orquesta de Tommy Olivencia.
Nuevo Cantante y Corista
De esta época, posiblemente el cambio de mayor impacto en El Gran Combo fue la salida de Mike Ramos como coreógrafo. Esto preparó el terreno para la llegada de Luis «Papo» Rosario en 1980. Rafael Ithier había visto a Papo cantando con Tempo 70, y conocía a su padre del programa de televisión «Tribuna del Arte» de los 50s y 60s.
Papo Rosario no era un cantante extraordinario, pero cantaba bien por lo que Ithier lo trajo mayormente como corista. Aparte de tener una personalidad bien agradable, Papo era buen bailarín, así que podría ayudar con las coreografías.
La entrada de Papo Rosario dio por terminada la era de traer coristas invitados a las grabaciones de El Gran Combo. Paquito Guzmán lo hizo de 1971 al 1977, y Yayo El Indio fue el invitado de 1978 al 1979. Con Papo ahora en los coros, las presentaciones en vivo sonaban casi idénticas a las grabaciones.
Te estarás preguntando, que pasó con las coreografías de los cantantes, las cuales han sido parte del «sello» de El Gran Combo?
Con la partida de Mike Ramos a la orquesta de Tommy Olivencia, Charlie Aponte se encargó de que las coreografías continuaran con el sabor de siempre. Charlie fue buen pupilo de las rutinas de Mike y continuaría haciendo sus propias rutinas.
Mientras, a Mike Ramos no le fue tan bien con la Primerísima. Allí, ninguno de los cantantes principales, primero Chamaco Ramírez y luego Frankie Ruiz, mostraron mucho interés en hacer rutinas complicadas de baile. Así que la estadía de Mike en la orquesta fue breve.
Salsa Buena y Constante
Ahora, con una plantilla estable, El Gran Combo produjo discos consistentemente buenos. En mi opinión, el periodo entre los dos últimos discos de los 70s, comenzando con «En Las Vegas«, hasta «Nuestra Música» en 1985 ha sido la mejor racha de discos consistentemente buenos que ha tenido El Gran Combo en su historia. Tuve el privilegio de verlos en vivo y bailar muchas veces en sus bailes durante esos años.
El disco «Unity» (1980), comenzó la década con un éxito inmediato. Hasta el día de hoy es uno de mis discos favoritos de El Gran Combo. «Compañera Mía» fue el primer sencillo, pero casi todas las otras canciones se convirtieron en éxitos eventualmente.
A ese disco le siguió «Happy Days», el cual no fue un disco tan fuerte en su totalidad, pero tenía 3 mega-éxitos. «A la Reina«, interpretada por Jerry Rivas, fue un palo. Cuando el Combo interpretaba esta canción, Papo Rosario hacía de las suyas, llenando el vacío que había dejado Martin. En las presentaciones en vivo, Papo se ponía una peluca pretendiendo ser «la reina». Los otro dos éxitos del disco fueron «El Menú» y «Timbalero«. Ambas se convirtieron en clásicos del Combo por muchos años.
Los éxitos continuaron con «Nuestro Aniversario» (1982), donde celebraron sus 20 años de existencia. Y en «20th Anniversary» grabaron algunas de sus canciones viejas con el sonido actual. A ese le siguió «La Universidad de la Salsa» (1983), un título que se convirtió en otro apodo para la agrupación. «In Alaska» (1984) e «Innovations» (1985) fueron otros discos excelentes. «Innovations» se mantuvo como disco #1 en las listas de Billboard por 24 semanas!
También en 1985 lanzaron el disco de Navidad «Nuestra Música«. Este fue el primer disco navideño que El Gran Combo grababa en 10 años, y resultó en un exitazo enorme, del cual aún gozan cada Navidad. Los discos que le siguieron fueron «Y Su Pueblo» (1986) y «25th Anniversary» (1987) los cuales tuvieron buena acogida.
El Gran Combo y la Salsa Romántica
Ya para este tiempo, la Salsa Romántica empezaba a sonar con mas insistencia en las estaciones de radio, capturando la preferencia de los fanáticos salseros más jóvenes. Frankie Ruiz lanzó su primer disco como solista, el cual fue un palo. El pianista Willie Sotelo fue el director musical de la orquesta de Frankie. Sotelo eventualmente tomaría la silla de Rafael Ithier como pianista de El Gran Combo. Otros cantantes como Eddie Santiago y Lalo Rodríguez también tuvieron éxitos con esta modalidad.
La moda de la Salsa Romántica comenzó a mediados de los 80’s y acaparó el éxito comercial de la Salsa hacia finales de la década. Rafael Ithier, quien siempre tiene un buen oído para los gustos musicales del público, no quería quedarse atrás en esta nueva modalidad.
En 1988 El Gran Combo lanza «Romántico y Sabroso«, el cual fue recibido con poco entusiasmo por los fanáticos salseros. El sonido tradicional con letras románticas fallo en captar la atención de la generación más joven de salseros. Tampoco impresionó a su fanaticada fiel. «Cupido» fue mi canción favorita del disco. Esta, junto a «Potro Amarrao» y «Quince Años» fueron las que salvaron el disco, el cual no tenía mucho más que ofrecer.
El Gran Combo Busca Ayuda
Para enfrentar el reto de la Salsa Romántica, El Gran Combo decide buscar ayuda fuera de la agrupación, según admitiera el propio Ithier en una entrevista. Para el disco «Ámame«, titulado igual que el primer sencillo de la grabación, los mulatos contrataron al saxofonista, arreglista, y productor puertorriqueño Ernesto Sánchez para co-producir el disco y ser su arreglista principal. Sánchez venía de hacer arreglos a varios éxitos de la Salsa Romántica, entre ellos «Casi Te Envidio» para Andy Montañez, y «Ven Devórame Otra Vez» para Lalo Rodríguez. Esta última canción le mereció el premio de Arreglista del Año en 1988.
A sus 28 anos, el egresado de Berkley College of Music era joven y era evidente que tenía un buen conocimiento del gusto de la juventud salsera. También poseía el talento de hacer arreglos que balancearan lo nuevo con lo viejo, de manera que no sacrificara el sonido clásico de la Salsa. Ernesto hizo el arreglo de seis (6) de las ocho (8) canciones del disco; Luis García hizo uno, y don Rafa hizo el arreglo de «Todo Bien«, una canción que no es de tema romántico sino humorístico.
Ernesto también se atrevió a traer al experimentado cantante Ray de la Paz para ayudar en los coros. En Nueva York, Ray había iniciado la Salsa Romántica de la mano de Louie Ramírez.
Tomen nota de que esta era la primera vez que Rafael Ithier le daba la mayoría de los arreglos musicales a una persona fuera de la agrupación. También era la primera vez en 10 años que El Gran Combo traía a un corista invitado.
Los resultados hablaron por si solos. El último disco de El Gran Combo de los 80’s, «Ámame» (1989) fue un palo, llegando a la posición #1 en la lista de Álbumes Tropicales dos veces. Estuvo un total combinado de 12 semanas en el tope de la lista a pesar de la competencia fuerte de Eddie Santiago («Invasión de la Privacidad«), y de Luis Enrique («Mi Mundo«).
El Gran Combo Se Prepara para los 90s
Propulsados por el éxito logrado en la década, el Combo entra a los 90s con una plantilla estable y un cierre espectacular al los 80s con el éxito de «Ámame«. Esto les dio confianza de poder navegar los retos de la Salsa Romántica en los 90s.
Pero todavía quedaba una interrogante para El Gran Combo. Tendrían que cambiar su identidad para continuar siendo exitosos en la próxima década, la cual a todas luces seria dominada por la Salsa Romántica?
Pero con su último disco, Los Mulatos del Sabor parecen haber encontrado la fórmula del éxito en la Salsa Romántica. Sin embargo, lo que parece a veces no es, como ya han vivido anteriormente a través de su historia. El éxito en los 90’s sería elusivo.
Eso lo veremos en la próxima parte de esta serie; «los 1990’s«.